Mindfulness y la felicidad.
La felicidad es un estado pasajero que queremos conservar el mayor tiempo posible. Incluso todo aquello que no lo sea, a veces es rechazable. Tenemos éste estado personal como algo a lo que alabar y «conseguir». Y aunque no podamos mantenerla por siempre, la buscamos donde y como sea. Vamos a mostraros cómo Mindfulness ayuda a mantenerla durante más tiempo. Además de sacarla desde nosotros mismos, claro.
¿Qué es la felicidad?
Es un estado transitorio donde las preocupaciones se disipan y pierden importancia. Donde todo parece ir de aquella manera que debiera y la sonrisa se nos pega a la cara. Sin que dejemos de estar así. Es, además, un estado ansiado y buscado que, por paradoja, nos provoca sufrimiento. Ya que no podemos mantenerla por tanto tiempo como quisiéramos.
La trampa de la felicidad
Socialmente la felicidad se promociona sobre todo en forma de objetos y metas alcanzables. Eso a nivel teórico, ya que a niveles prácticos y de investigación científica, la cosa varía. Y mucho.
La obtención de éstas metas y objetos provocarían un temporal estado de felicidad. Pues buscaríamos el siguiente y el siguiente en nuestra propia lista o en la influenciada por la sociedad. Un coche, una casa, una pareja, un reloj caro, unos zapatos elegantes, un trabajo seguro, una fuente de ingresos altos… Todo ello nos alenta a caer en esa «trampa» donde caemos insesantemente cada vez que conseguimos esos objetivos. E incluso cuando no lo hacemos. Os recomendamos el libro de Russ Harris que tiene tal título y que os enseñará valiosas aplicaciones prácticas para el día a día. Tal como trabajamos Darío y yo en terapia.
Lo que significa fluír en el presente
Fluir en el presente sería lo más cercano a una felicidad prolongada durante un tiempo específico que uno puede practicar. Por ejemplo, estando en una tarea que le hace atender a los estímulos de ésta y poner sus capacidades a trabajar a un nivel medio-alto. Lo podemos ver en el capítulo 12 de Mindfulness y el deporte.
Cómo nos ayuda Mindfulness para alcanzar esa “felicidad”
Para ello es básico trabajar las prácticas de atención plena con las 7 actitudes de Mindfulness. Entonces, entrenar Mindfulness y la felicidad de manera conjunta irá saliendo poco a poco. Uno puede aprender a estar más en el momento presente. Así como aprender a focalizar su atención a lo que le parece importante en ese momento, presente a presente. Estado que se prolongará hasta tener más conciencia de lo que realmente disfruta en ese momento. De todas aquellas cosas que pasamos por alto por tener el piloto automático. Aunque sea lo más nimio y lo más importante a la vez: tener la conciencia de estar vivos.
La aceptación del sufrimiento y la construcción de una vida en base a valores
Como otras veces hemos hablado, Mindfulness y la felicidad irán de la mano. En una vida que ha aprendido a aceptar que vivir y sufrir van de la mano. Por lo que no tendremos que vivir en una constante evitación de lo que nos haga sufrir. Sino en base a lo que nuestros valores nos transmiten y nos «empujan» a hacer de alguna u otra manera.
¡Te esperamos en la plataforma de formación propia con cursos! Entra en estoesmindfulness.com donde tendréis acceso cada semana a un nuevo curso para iniciar o profundizar vuestra práctica de Mindfulness. Además, tendréis acceso a un grupo de telegram privado en el que entre todos nos ayudamos a ser mejores meditadores.
Nos encantaría saber cómo se mezclan Mindfulness y la felicidad en vuestro día a día. ¡Déjanos tus comentarios!
Y como siempre, nos despedimos de ti animándote a que nos comentes en los capítulos, le des buenas valoraciones si así los consideras. Nos des «me gusta», nos recomiendes a otros y te suscribas. Seguimos cada semana aportando nuestra parte para hacerte un mejor meditador de Mindfulness. ¡Que tengas una semana plena!
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.